alone

martes, 9 de febrero de 2010

hay veces en las que me encantaria por un instante no estar acá, hay veces en las que quisiera desaparecer por un momento. Irme a otro mundo; a un lugar paralelo, silencioso, sereno, solitario... Para asi sentir que descanzo en paz, para asi sentir que solo yo existo y que nada mas importa, que no hay nadie mas alla aparte de mi, nadie mas a quien rendirle cuenta, nadie con quien tener que ser amable, nada de lo que preocuparse, ni nada.

Hay veces en la que me encantaria escaparme a un mundo solitario para estar conmigo misma y no sentir obligaciones, no tener que hablar, no tener que ser agradable, no tener que sonreir, no tener que actuar de acuerdo a ningun prototipo, no tener que amoldarme a nadie, solo ser...solo estar.

Y hay veces en las que me encantaria solo por un momento que de pronto toda civilizacion desapareciese y se quedase solo yo y mi conciencia; que de pronto las cuidades se quedasen vacias: los parques, las calles, las escuelas, todo... sin nada, como un desierto urbano. Para asi respirar y poder caminar sin sentir ninguna preocupacion, para asi volver real las mas extrañas fantasias: poder quemar el dinero de los bancos, llevarme las ropas de tiendas excentricas, echarme una siesta en una tumba, liberar las mascotas de las tiendas, robar el piano de una orquesta, escuchar mi musica favorita desde lo alto en toda la desierta cuidad...o yo que sé.

Estar solo yo y conmigo...

Hay veces en las que quisiera por lo menos un dia, en el que no existiese nadie, o en el que yo existiese solo en mi mundo sin que nadie me extrañe... No sentirme atada a nada, sentirme insignificante, invisible, inexistente para todos... sentirme ausente.

Solo dias, solo dias.